El Jurado de los premios taurinos de la Diputación de Valencia, compuesto por el diputado de Asuntos Taurinos, Isidro Prieto, los diputados Francisco Tarazona y Emili Gregori, que actuaron como vicepresidentes del mismo, y los vocales: Eduardo Altarriba, María Irene Beneyto, José Luis Benlloch, Francisco Brines, Pedro J. Cáceres, Vicente Garrido, Vicente Igual, “El Choni”, Juan Martínez, Manolo Molés, Francisco Picó, Francisco Puchol, Rafael Roca, “El Soro”, Vicente Sobrino, Joaquín Soler, Miguel Tatay y José Luis Villanueva, ha redactado un «manifiesto en defensa de
“Declaramos con rotundidad nuestro apoyo a
Reconocemos que el toreo ha sido y es motivo de profunda inspiración y verdadera musa de artistas de todos los tiempos, superando en sí misma y por su grandeza, cualquier frontera física o ideología política. Y es por ello que hemos compartido y comprendido esa profunda fascinación por
Evidenciamos que el toreo es un mundo cultural de incalculable valor que ha llevado a esos geniales creadores a expresar sus inquietudes artísticas a través de diversas manifestaciones e interpretaciones y que siempre han revelado la importancia del toreo, de su inconmensurable nobleza y estética. Y es que, ¿quién no es capaz de reconocer la belleza de la tauromaquia entendida por Picasso, tan diferente a la de Goya, Manet, Lucas Villamil o Botero?. En filosofía, Ortega y Gasset no dudó en manifestar que era impensable analizar la historia de España sin considerar las corridas de toros, una pasión a la que se unió la mayoría de la generación del 27, y que llegó incluso al mundo del cine de Hollywood, todavía en sus albores, a través de “Sangre y Arena”, basada en la obra de Blasco Ibáñez, y de la que Rodolfo Valentino llegó a decir que era su mejor película.
Defendemos que los toros son una fuente de emoción estética, de transmisión de conocimiento acerca del vivir, con su peligro y su muerte, con su alegría de luchar y su final trágico, porque su tradición y su nobleza han inspirado el arte de todos los tiempos. Virtudes que resalta el poeta valenciano Carlos Marzal, que añade:” Quien no sepa ver eso, debería pararse a pensar, porque se está perdiendo un motivo de placer, pero sobre todo una fuente de sabiduría”.
Por ello, destacamos que el toreo forma parte de nuestra cultura, no la de unos pocos, sino la de todos, y es por ello que debemos reivindicar su carácter de patrimonio único y demandar la defensa de este arte, que forma parte de la brillante historia cultural española.”